Esta tarde me ha ocurrido y no, no ha sido por una mujer.
Esta tarde no he podido contener una sonrisa, una de satisfacción.
Esta tarde mis manos han tocado algo para lo que seguro que estaban destinadas y a pesar de lo que puedan decir las malas lenguas ese algo no se ha desintegrado, no soy como Atila.
Esta tarde he tenido en mis manos un violín y le he arrancado dos notas, no he dicho dos chirridos, he dicho dos temblorosas, dubitativas y tímidas notas pero audibles y distinguibles, con entidad propia.
Y esta tarde ha sido la primera de muchas, espero, puesto que voy a cumplir uno de esos sueños que tienen los hombres cuando no tienen que hacerse los hombres: voy a aprender a tocar el violín.
El Otro
"Y Dios vio que esto era bueno"
Gen 1:10
2 comentarios:
me has arrancado una sonrisa... :-)
Cumplir sueños es el mejor regalo que se puede hacer uno a si mismo.
Enhorabuena por dar ese gran paso y que lo disfrutes mucho.
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